La Sequía - (parte 5)

Quinta parte de mi primer cuento:

La bruja no era lo que se podía decir una belleza. Como bien saben, las brujas malas siempre son feas, pero esta era mas fea que cualquier otra que hayan visto jamás. No voy a describirla ya que se pueden asustar, pero era una señora con una mezcla entre chuki, un vampiro, frankenstein y con el peor olor de todos los siglos de brujas, como si hubiera vivido cien mil años en el basurero mas sucio de todos.
La bruja, al verlos, los invito a pasar, y ellos, como niños educados, aceptaron. Dentro de la casa no había nada, excepto una mesa pequeña y cuatro sillas, que según la bruja eran para visitas, pero dudaban que ella tuviera visitas muy seguido.
Los niños decidieron ir directo a lo que venían y le expresaron su problema. La bruja escuchó atentamente y luego dijo:
-Yo no tengo ningún problema en ayudarlos, pero mi jefe, que es un mandón, me pide que cobre por cada trabajo que realizo por el bien de la gente, así que tendremos que ver ciertos puntos antes de hacer un trato.
-Nosotros haremos lo que nos pida- expreso Felipe.
-Si, haremos lo que sea para que nuestra gente pueda sobrevivir a la sequía- dijo Emily.
Al escuchar eso se dibujó una gran sonrisa en la cara de la bruja. Entonces fue hasta el fondo de la casa y no se le vio más, hasta tiempo después. Como la bruja se demoraba, los dos amigos se sentaron en unas sillas, uno frente al otro, y se pusieron a conversar.
Emily quería preguntarle muchas cosas a Felipe, pero este se le adelantó.
-¿Qué venías pensando camino al bosque? yo te hablaba y no me escuchabas, así que tuve que tomar tu mano para poder aligerar el paso, y como que ahí despertaste un poco, pero luego volviste a irte, por decirlo de alguna forma.
-lo que pasa es que estaba recordando algunas cosas
-¿como qué cosas?
-estaba recordando antiguos tiempos, cuando andábamos juntos para todas partes de la mano, siempre llamabas a mi casa para saber si podía salir a pasear contigo por las tardes y todas esas cosas, ¿recuerdas?
Emily no se había percatado de que Felipe estaba empezando a poner esa casa de enojado que ponía cuando el tema de incomodaba. Él se paró de la mesa y se puso a dar vueltas de un lado para el otro, luego de un momento dijo:
-Pensé que te habías dado cuenta hace muchos años, Emily- dijo Felipe con voz queda, y se alteró más.
-¿Darme cuenta de qué?- preguntó Emily, rezando a Dios que fuera lo que estaba pensando.
-¿Es que no lo entiendes?- dijo Felipe volviendo a alterarse -¡Yo te amo! te he amado siempre y tú nunca te has fijado en mi más que como un amigo-. Volvió a sentarse, con la cara roja como un tomate. Emily se puso como loca. Por fin iba a poder decirlo.
-Yo también te amo Felipe, pero siempre pensé que tú estabas enamorado de otra, después de lo que me dijiste en el lago...
-Pero si estaba hablando de ti- dijo Felipe más calmado -y tú cuando me dijiste que te gustaba un chico de la clase, te referías a...
-¡a ti! también me refería a ti.
-si logramos sobrevivir a la bruja, ¿quisieras salir conmigo?
-por supuesto- dijo Emily, que en ese instante se sentía la niña más feliz de todo el universo. Felipe se acercó a ella, la miro a los ojos, le agarró la cara suavemente y acercó sus labios a los de Emily. Ella estaba temblando, era muy feliz, pero la felicidad no podía durar para siempre. La bruja venía del fondo de la casa, sobándose las manos, como si lo que estaba planeando fuera muy diabólico. Se paró en frente de ellos y, de una manera muy rápida, les dijo:
-Mi jefe me dijo que deberán pagar de la siguiente forma: yo haré que se vaya la sequía para todos, excepto para ustedes- dijo la bruja con cara de mala -pasarán una semana, o sea, siete días, sin poder beber ni sentir ningún tipo de líquido, ya que si un líquido toca alguna parte de su cuerpo, este se evaporará al instante, ¿comprenden?- y los quedó mirando con cara de ¿me perdí algo?.
Los chicos, como despertando de un maravilloso sueño, dijeron como dormidos: -si-

Queda muy poco.
No puedo creer no romántica, melosa, que era cuando chica.
La condición ya está puesta.
Entendieron todo... ¿Pero aceptarán?

Próximo miércoles otro capítulo.












EB.-*