miércoles, 3 de noviembre de 2010

Lamentable...

Si ocultar fuera una carrera, tendría el magíster.
Actriz y abogada serían mis otras opciones, pues estoy acostumbrada a eso. ¿Qué más te puedo decir?
Te ofrezco mis disculpas por haberte mentido, por haberte engañado, pero en el amor es mi defensa y no se combatirle de otra manera. Tarde aprendí que quel no es el camino. El amor no es una guerra, aunque enfrentes varias batallas. No se trata de entender, si no de sentir, de decidir, de actuar. No de aquel acto en que maquillas la realidad, y la escenografía no es más que tristes cartones, si no más bien aquel acto de la realización permanente y constante de tus decisiones, de tus planteamientos.
Siendo yo, a estas alturas, una profesional, logre engañarme torpemente, ciegamente. ¡Qué terquedad! No te merezco hombre sensible y honesto, amable y prudente. Tan solo mira mi desgarbada caligrafía y dime si no es una tortura ¡Pobre de mí! esta triste impulsividad, esta triste profesión. Puede que un día me perdones, y que pueda comenzar otra vez. Hola, me presento,... no sucederá. ¿Qué imagen tendrás de mí? La de una triste enamorada, atrevida y confundida mujer que solo quiso estar contigo, sin nunca decir la verdad.














MJ.-*

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